Nace el domingo
en blanco y
negro,
embutido en la farsa absurda
de una escena
de los hermanos Marx. Todos
somos Harpo, con un cencerro
en lugar de bocina. Unos,
aborregados sin querer
pensar. Nosotros
para hacer oír
la voz que nos han robado. En
blanco y negro, este
domingo de elecciones
generales,
todos
somos Harpo Marx.
4 comentarios:
Es la hora de gritar o, por lo menos, de tocar la bocina. Se acabarón los huevos duros sólo para unos pocos.
en blanco, negro y sepia q tb votamos esa gran cámara que es el senado; yo de mayor quiero ser senador, pero no de estos, yo de los wenos, de los romanos, q esos si molaban.
Pues eso, marcón el que no vote, aunque sea sin gritar y en blanco y negro.
Mi cencerro suena como una letanía. Mudito y triste. Borracho y enfermo. Pequeño como el eco de esa voz que se pierde en un pozo. Jesucristo huele a ojete de perro. Todos somos Harpo Marx.
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