1 de marzo de 2010

el documental

-Jorge, cari, he estado viendo un documental en el que decían que poniendo una misma canción al bebé durante el embarazo luego, si lloraba como un descosido y ponías la canción se callaba. Y además motiva los sentidos y la inteligencia.
-Ah, guay. Grabaré un disco con el "never tear us apart" de inxs. Además como tengo varias versiones no es tan aburrido para ti.
-Sí, claro y que más. Tiene que ser Mozart o algo así. Clásica.
-No, no, mi vida. Inxs y ya está. Tengo derecho como padre a transmitirle todas mis frustraciones y deseos jamás conseguidos, no te jode, para eso soy su padre y le cambiaré el pañal. Porque, ¿soy su padre, no?
-pero cómo eres tan bobo, de verdad, hay veces que no te aguanto. Inxs no, a ver si nos va a salir un colgado-paranoico-suicida como el Michael Hut...como se diga.
-Pues déjame, no sé,uhmm... Alicia, de Bunbury.
-Sí, no faltaba más. Mejor un gilipollasconairesdegrandezaquesecreedios.
-Ehh, schss, no sigas por ahí, mi vida, no sigas por ahí. Vamos, ya, métete con Raúl, venga, di algo del que nunca hace nada. Y luego me pisas un huevo con el tacón y me echas ácido en la cara, vamos.
-Ah, es verdad, que ayer marcó. El quinto, uuhh.
-Joder, que más te da, déjame ponerlo a inxs, que me hace ilusión, mi vida.
-Ya sé porqué no quieres que escuche a Mozart. Temes que salga poeta, o algo peor.
-Yo soy poeta y no pasa nada, no es por eso.
-Ja, que no dice. Tú no eres poeta, ¡si reniegas de ellos!. Poeta, poeta, dice. Un cerdo es lo que eres. Pero, ¿has leído tu libro?, sólo hay que guarradas.
-Tampoco es para tanto. Es que la gente se queda en lo superficial.
-Y qué me dices del verso que te obligué a quitar o me divorciaba: "a aquella mujer que me reñía / como si fuera mi madre /la di lo que quería y de vuelta / a la infancia tragó / todo mi calostro". Calostro, joder, querías poner en un poema CALOSTRO. Poeta dice el muy...
-Vale, ahí me pasaba un poco, pero tengo una parte del público que es lo que demanda. Y era de broma, que conste.
-Mira, tienes miedo a que salga un hijo más inteligente que tú y que te supere antes de los quince. Que vaya a bares de listos con gafas donde se juntan aspirantes a escritores que piensan que los demás son una mierda por no saber quien es Bukowski y desdeñan a los que ven fútbol, que esa es otra, qué respeto te van a tener los poetas esos que lees sus blogs cuando sepan que eres futbolero.
-Bueno, mi vida, déjalo, de verdad. A ver si alguno se va a molestar y dice, de qué va este imbécil.
-Uyy, ahora no queremos que se sepa nada, pues lo digo yo. Tienes miedo a tener un hijo como ellos. Más listos y cultos que tú, que mientras ellos leían y estudiaban tú únicamente veías una y otra vez videos de Faemino y Cansado o jugabas al fútbol. Tienes miedo a que tu hijo sea mejor que tú, por eso no quieres ponerlo a Mozart.
-Eso no es cierto y lo sabes. Prefiero que salga gafapasta a ultrasur, pero no quiero que sea un gilipollas engreído que se ría de sus padres por saberse todos los nombres de la generación del 27, que vaya hasta en verano con palestina y no salga del bar pseudo-cultureta lleno de frikis como él. Que carezca de sentido del humor y crea que la poesía es algo "demasiado serio e importante". Simplemente.
-Mira, Jorge, vamos a dejarlo pero el bebé va a escuchar, elige, a Mozart o a Bisbal.
-No, no, eso no, por favor.
-Podíamos poner a Dylan, pero como...
-Eso no lo digas aquí o ...
-Ah, te da vergüenza que para dos que te leen sepan que Dylan te aburre y no te gusta nada, eh.
-Es que soy más de Cohen.
-"Soy más de Cohen", siempre pensando que dirán los demás, por eso no aceptas que hagan comentarios en tu blog, no sea que te digan que no vales para nada. Pues ya te lo digo yo. No vales para nada. Y que lo sepa todo el mundo: a Jorge M. Molinero no le gusta Dylan, ala, ya lo saben.
-Pero cómo eres, de verdad. Si encima dices que te gusta lo que escribo y es mentira. Y no acepto comentarios porque soy un poeta de culto. Underground.
-Es porque te quiero, pero no eres Benedetti precisamente. Y underground mis cojones, lo que pasa es que nadie te hace caso. Si te dieran bola saldrías hasta en gran hermano, gilipollas.
-Además decías que hacía progresos, que mi nueva poesía estaba más trabajada y seguía siendo yo.
-Pues no. Ahora que vas de poeta no se te entiende nada, como a los de los bares donde irá tu hijo. Porque Mozart o Bisbal, tú eliges.
-Mozart, Mozart, ya está, decidido. Preguntaré a Velpister qué música poner al bebé. Pero me dejas ver el partido, ¿vale?